La palabra vibrante, rebelde y poderosa de Isidora Aguirre, estremeció a un auditorio expectante, cuando oportunamente le otorgamos el "Premio Fundación IberoAmericana 2010", recién el pasado 13 de noviembre. La ceremonia fue abierta por una ponencia del filósofo y músico Gastón Soublette, parte del directorio que nombró a un jurado de escritores presidido por el novelista Walter Garib, y que por unanimidad decidió el premio a quien ha sido destacada por algunos críticos como la mayor dramaturga de nuestra Ibero América.
La visitamos para comunicarle esa noticia y nos recibió como siempre ha sido "La Nené", llena de historias y de proyectos. Su vida y sus amores eran tan o más apasionantes que su obra de ritmo único y de sensibilidad honda.
Sus escritos son un espejo de la realidad chilena, aunque su propio país le negó reiteradamente el Premio Nacional, ignorando con ello páginas tan notables como las de sus novelas: "Doy por Vivido todo lo Soñado" y "Cartas a Roque Dalton", ambas publicadas en España hace más de veinte años. Creaciones que son hoy referencia ineludible cuando se habla de nuestra literatura en Europa.
José Saramago dijo de Isidora: " … debería ser para los latinoamericanos una dramaturga comparable a Brecht". Así también Darío Fo dijo con admiración que siempre ha considerado "Los que van quedando en el camino", de Isidora, como la más alta demostración de teatro épico.
En París se relacionó intelectualmente con: Jean-Louis Barrault, André Bretón y Eugene Ionesco, al que recibió en Chile a fines de los '60. También fueron gravitantes las amistades con el dramaturgo Jorge Díaz en Madrid y con el poeta cubano José Lezama Lima.
Ha sido ampliamente reconocida por su ya cincuentenaria obra "La Pérgola de las Flores", en la que refleja un sentido social, con las floristas que peligran perder su fuente de trabajo y son apoyadas por los estudiantes. Sin embargo el éxito de esta magnífica obra musical, eclipsó otras muy notables obras de teatro como: "Lautaro", "Retablo de Yumbel", "Población Esperanza", "Las Pascualas", "Pacto de Medianoche", "Dos más dos son cinco", "En aquellos locos años '20", "Diálogo de Fin de Siglo", entre muchas otras.
Es la primera dramaturga chilena conocida internacionalmente, una autora pionera, inteligente y polémica, basada en el poder que tiene el teatro para discutir y crear. La presentamos y declaramos Tesoro Nacional. Esa fue una de sus últimas alegrías y participación pública. Ella decidió subir al estrado y sorprendernos con un agradecimiento a este galardón, especialmente emocionada destacó que es un premio otorgado por sus pares.
Este Homenaje de Fundación IberoAmericana fue publicado en la página 12
del Periódico El Cordillerano en su edición de Marzo de 2011